jueves, 12 de febrero de 2009
Por San Valentín...¡ CARTA DE AMOR A UNA HIPOTECA !
Mi ser otrora hallábase pleno; bastó una firma, una singular rúbrica precedida de una interminable espera , para que un notario nos uniera para siempre. ¡ Oh ! ¡ Cuánto amor desde el mágico momento ! , mi vida entregada a tí: mi banco, mi deuda . Me colmas, hipoteca de mi vida. Así ya no necesito nada, sólo lo mínimo para una subsistencia casi ermitaña , pero no en natura, sino entre los muros de la celda de panal que mi amada hipoteca me facilita.
Quiero rendirte homenaje, caer a tus pies, has cambiado tanto mi vida que no soy , somos tú y yo. Desprecio el gasto, mis ropas son ya tan sencillas que parecen etéreas; mi alimento es mínimo. No recuerdo un homenaje en restaurante alguno, porque tú, amada mía, me has liberado de lo material, por lo más material.
Fidelidad absoluta te debo, eres el centro de nuestra familia. Nuestro amor es tan sincero que no cabe infidelidad alguna.
Y ese día del mes en el que vences y yo, con ternura y corazón palpitante, me dirijo a tí, a tu semblante en el banco , y te rindo pleitesía, cumpliendo mis obligaciones... ¡ mi satisfacción crece en inversa proporción a mi prosperidad económica !, pero todo por tí, mi ídolo.
Mi historia ya te pertenece y mi porvenir de tí pende. Quizás por seguir a tu lado, de todo haría. Mira la imagen, fuere donde fuese y hasta de mujer sponsor feliz sería.
miércoles, 4 de febrero de 2009
"LEVIATANES" DE NUESTROS DÍAS
Hambre, soledad, miseria, violencia, odio, enfermedad, hedonismo, riquezas, egoismo, caridad, amor, lujos, guerras, ira, gula, perdones y rencores...y manos invisible que manejan marionetas como en un teatro: son los grupos de potencia y autoridad, unos pocos sabidos, los más, desconocidos.
He aquí nuestros " Leviatanes " de hoy , los que arriba habitan. Otrora se conocía al Leviathan como el monstruo bíblico que personificaba al mal. Ese engendro no se disfrazaba, era el mal y no se enmarcaraba. Ahora habitan camuflados en domóticos bloques. ¿ Quiénes son ?.-
Ya Hobbes elaboró toda una teoría sobre el hombre y la sociedad, resultando un estado de poder absoluto, como necesario para el devenir de nuestros días, dado "el lobo" que se escondía en cada hombre y el lema de " la guerra de todos contra todos " que distinguía a la especie humana, debido a la escasez de bienes. A ese estado poderoso, absoluto lo llamó " Leviathan" como metáfora del poder, en recuerdo de aquel monstruo marino y bíblico.
Triste teorema el de Hobbes y tristes los días que el hombre habita en la tierra.
Pero, casi cuatro siglos después de Hobbes, la historia, inclemente, deja abierta las puertas a la antropología del filósofo, aunque las cierre firmemente a un posible estado totalitario y absolutista. Una y otra vez los incidentes se reiteran y el hecho de un totalitarismo revierte cruel para el individuo en sí. El hombre es ante todo ser individual, y a su vez, social. El respeto a las ideas propias y la consumación de los derechos humanos chocan vilolentamente con un gobierno tirano y despótico.